jueves, 14 de enero de 2010

Apoyo a las personas de la 3ra edad por parte del GDF(México)

Con la finalidad de reducir los "gastos" de nuestro gobierno capitalino, se han dado a la tarea de reducir el número de tarjetas de beneficio popular de las personas de la tercera edad; toda vez que estas siguen siendo utilizadas por los familiares cuando el titular ha fallecido o lo más común: los buitres familiares llevan a firmar al pobre anciano(a) y no le toca nada, es decir; le chingan toda su lana y el anciano queda sin protección económica.
Casos muy cercanos a un servidor han sido denunciados toda vez que la persona de 3ra edad ha sido despojada de su tarjeta y olvidada; no se le brinda atención médica y la estafan monetariamente y con las joyas de oro.
El GDF ha emprendido una campaña de investigación enviando a los domicilios trabajadoras sociales a fin de observar las condiciones en que viven y brindarles apoyo, también ofrecen ayuda legal para denunciar abusos de personal de las trabajadoras sociales(que generalmente extorsionan a los ancianos amenazando con retirarles las tarjetas)y denuncias contra el olvido, vejación y maltrato por parte de familiares directos o terceras personas.
Así que mucho ojo y recuerden que las personas de la 3ra edad están llenas de sabiduría y experiaencia y esa es la base del crecimiento. Ejemplo clarísimo: Japón.

Cedula de identidad maquillada SIN confidencialidad

Ahora salen conque la credencial inútil para sus propósitos originales del IFE va a amparar nuestros datosa biométricos y toooda nuestra información como datos bancarios, escolaridad, historia laboral y crediticia, historial médico, hábitos de consumo...
La vulnerabilidad de esta basura ya se hizo evidente con el padrón del IFE que fue vendido y revendido a empresas de marketing y bancos para promocionar basura.

Recientemente derrumbaron los juzgados anexos al archivo General de la Nación(AGN)lo que antes era el "Palacio Negro de Lecumberri" inmortalizado por ser la cárcel de varias peliculas mexicanas y en especial la de "nosotros los pobres" y "el apando". Bueno, ahí antes tramitaban el otro gasto inútil del CURP y nos ofrecieron una ultraconfidencialidad enorme digna de seres místicos. La mala noticia:
Al demoler los juzgados sede de la CURP no tuvieron la delicadeza de conservar esa tan sonada "confidencialidad" y tiraron todos los expedientes a la calle quedando regadas y al descubierto miles de CURP's no recogidas o no entregadas. Juan de las pitas que fuera caminando podía obtener datos del desdichado usuario sin que hubiese perseguimiento penal ni pagar a detectives.

¿Así o más confisencial? Que le crean los católicos.